A Pequeñín le encanta la música, por eso, cuando, en el Taller de Lactancia, En Armonía realizó una clase de demostración, quedé fascinada. Así que, en cuanto hemos podido nos hemos apuntado.
El primer día, Pequeñín se dedicó a observarlo todo(es el más pequeñín) y a chupetear las pequeñas maracas(se adaptan perfectamente a sus diminutas manos).
En mi opinión, el valor de este taller reside en que:
- las monitoras son muy agradables y dulces con los niños, están pendientes de ellos y los saben involucrar en las diferentes actividades
- las canciones son compuestas expresamente para el taller
- las canciones se acompañan de sencillos gestos y movimientos coreográficos destinados a desarrollar habilidades y aprender conceptos
- se usan instrumentos musicales "artesanales", como los tambores, que son cajas recubiertas de fieltro de colores.
Estoy deseando que llegue la siguiente clase de estimulación temprana...en casa las llamamos la CLASE DE MÚSICA(emoticono de felicidad :D).
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